por Zep Miér 23 Mar 2011, 19:38
Sobre las subvenciones del cine español, japonés, croata o noruego.
El arte siempre ha necesitado de mecenas, si no fuera por ese mecenazgo (ya fuera público y/o privado), ahora no habría catedrales, ni la gran mayoría de grandes obras pictóricas, ni de la literatura, ni de la música, ni del cine, porque evidentemente la cultura es industria (sobretodo hoy en día) pero me gustaría pensar que no sólo debe valorarse en términos industriales de rentabilidad económica, porque si fuera así, se acaba el arte, la cultura, la ciencia y la mismísma humanidad, al menos tal y como la entendemos desde hace siglos.
Los mecenas han sido a lo largo de toda la historia del arte, públicos y privados, exactamente igual que hoy día, pero... ¿de qué os "fiáis" más?, ¿de una película producida por The Cocacola Company o de una que ha sido seleccioanda en concurso público por personas - gestores y funcionarios públicos- cuyo sustento no depende de apoyar tal o cual marca o tal o cual mandato empresarial, ni político, ya que los políticos cambian y los técnicos y los funcionarios de carrera quedan.
Para llevar a cabo un proyecto de cine serio, cualquier productor, hoy día, mira todo tipo de subvenciones, desde la de una entidad de su barrio hasta las de la UE, y por otro lado, a veces, opta también por algún patrocinador, que intentará imponer algo, porque ahí si que el criterio es industrial y no artístico.
Yo, amigos, prefiero una peli subvencionada por todas las admistraciones del mundo, al menos en las llamadas "administraciones democráticas", como la nuestra, que no intervienen para nada en el proceso creativo sino que simplemente sueltan la pasta, - aunque todo hay que decirlo, la URSS, Cuba o Alemania produjo grandes obras subvencionadas con dinero de regímenes dictatoriales que sí intervenían y mucho en el proceso porque simplemente eran pelis de encargo, aunque a veces hasta había criterio artístico, valga la paradoja -, que una película "subvencionada" por The Cocacola Company, IBM o Microsoft, aunque todo llegará.. y quien sabe, seguramente se puede hacer una peli llena de "product placement", como algunos programas de TV que de golpe y porrazo el presentador deja de hablar del terremoto de japón y te hace un publireportaje de las natillas danone, pero me cuesta creer que ese sea el único camino a sgeuir también en el cine, y en todo caso me entristece.
Y a quien no le mole el cine que no vaya, a mí no me gusta el arte abstracto pero no me meto en si subvencionan o no tal exposición, porque me preocupa más, por ejemplo, si el dinero se gasta en compra-venta de armas, que si se gasta en arte, aunque no vaya a ir nunca a ver una exposición de Gina Pane, y no sé si una exposición de Gina Pane es arte o no o si una película lo es o no, pero lo dicho, confío más en el criterio técnico de la administración (y diría que de todas ellas) que en el de Pepsicola, que lo que quiere es vender pepsis y que si no venden pepsis o su imagen no sale maravillosamente bien destacada, me retiran la peli porque no es "rentable".
