BRYAN ADAMS - INTO THE FIRE (1987)
Discográfica: A&M
Estilo: AOR
Productores: Bryan Adams y Bob Clearmountain
Formación:
Bryan Adams: Cantante, Guitarra, Teclados, Piano, Coros
Keith Scott: Guitarra, Coros
Dave Taylor: Bajo
Mickey Curry: Batería
Robbie King: Órgano
Jim Vallance: Teclados, Piano, Percusión, Coros
Tommy Mandel: Teclados, Órgano
Ian Stanley: Teclados
Dave Pickell: Piano
Tracklist:
01. Heat Of The Night
02. Into The Fire
03. Victim Of Love
04. Another Day
05. Native Son
06. Only The Strong Survive
07. Rebel
08. Remembrance Day
09. Hearts On Fire
10. Home Again
Esta obra maestra salía a la luz en 1987 y se trataba del quinto trabajo del canadiense tras tres años de sequía y borrachera tras su exitoso “Reckless”. Para mí un disco infravalorado (en el mundo comercial, no entre los amantes del género) y bastante desconocido en comparación con otras obras del canadiense, pero no por ello deja de estar entre sus mejores discos. Ya sabemos que en muchos casos ha habido discos menos famosos pero que en calidad pueden ser superiores a los más laureados, y éste puede ser uno de esos casos.
En “Into The Fire” vemos a un Bryan Adams mucho más maduro y personal y con aún más protagonismo en el disco (varios solos de guitarra suyos como por ejemplo en “Another Day” y en “Heat Of The Night”). También hay varias canciones donde coge el mando en el piano, teclados, percusión y demás como ya hizo en discos anteriores.
A la producción está el propio Bryan Adams como siempre y Bob Clearmountain (The Rolling Stones, Toto, Bon Jovi, Bruce Springsteen, y un largo etc…), última vez que trabajaría con él pues en el siguiente disco ya entraría en juego el señor “Mutt”.
Y ya metiéndonos de lleno en el álbum, éste comienza con “Heat Of The Night”, un medio tiempo rockero que va subiendo en intensidad conforme avanza la canción; gran base rítmica y posterior estribillo pegadizo que gana con las escuchas. Estructura muy clásica; después del solo de guitarra llegamos al clímax de intensidad y sentimiento con matices en la parte final muy conseguidos en el estribillo y en los punteos rítmicos.
Le sigue “Into The Fire”, otro medio tiempo que da título al disco, un tema mucho más melódico que el anterior, es una joya, muy elegante donde parece que el bajo toma las riendas rítmicas de la canción, gran protagonismo; hay buenas guitarras y muchos detalles en los teclados y piano puntuales que adornan excepcionalmente la pieza. Parón con riff de guitarra después del solo que hace ganar en sentimiento. Perfecta.
“Victim Of Love” es una balada impresionante a mi juicio, comienza muy tranquila, muy clásica pero va subiendo paulatinamente de intensidad, con una lead guitar siempre por debajo y una voz de Bryan muy rasgada; la canción en sí y sobre todo en su parte final es desgarradora y de muchísimo sentimiento. Ese final con voz, estribillo y solo de guitarra final es muy intensa (aunque me repita) y a mí particularmente me llega hasta lo más hondo y me pone los pelos de punta… me hace hasta sudar jeje.
Para volver al ritmo rockero tras ese pequeño inciso lento tenemos “Another Day”, realmente el primer tema rockero a la antigua usanza, de las directas, rápida y sencilla, pero con muchísimo trabajo detrás, un piano siempre por debajo y una lead guitar en este caso a cargo del propio Bryan como dije antes; después del solo otro parón tan típico en nuestro estilo pero no con estribillo sino parón que da pausa a la canción para terminar de una manera más vertiginosa a modo de solo de guitarra. Me encanta esta canción, insultantemente simple pero de las que levanta el ánimo.
La sensibilidad llega a lo más alto con “Native Son” y no me quiero extender demasiado que me enrollo como las persianas, pero es que este tema no se puede describir con palabras, sólo escuchándolo se dice todo; probablemente la más elegante del disco. Tema que va increscendo poco a poco, con una guitarra preciosa; el momento posterior al solo de guitarra, tras el estribillo donde hay un parón y un nuevo solo de guitarra mucho más personal y su posterior arranque hasta el final es sencillamente maravilloso. ¡Tremenda! Comentar que este tema en directo pone los pelos de punta.
Continuamos con “Only The Strong Survive”, tema de rock clásico americano en estado puro para animar al personal y a lo que no es el personal; un trallazo tremendo con un puente-estribillo pegadizo a más no poder. Directo para cargar las pilas pero con mucho sentimiento y matices de piano. iba a decir que es otra de mis favoritas pero es que el disco entero es favorito.
Otro de los momentos sensibles lo tenemos con “Rebel”, una preciosa balada muy fina y con mucho sentimiento; comienza con la voz y con el piano que va subiendo progresivamente en el puente para desembocar con un estribillo aún mejor y lleno de fuerza desgarradora. El parón que hay después del solo de guitarra y el grito de Bryan es precioso (otro momento de pelos de punta), con esa vuelta al piano y acompañándole únicamente la voz. Otro temazo de 10.
“Remembrance Day” es otro de esos medio tiempos que me encanta y que personalmente me parece perfecto, elegante, sencillo pero brillantísimo, dándole el protagonismo de nuevo al bajo en el inicio del tema para posteriormente ir subiendo hacia un puente que anticipa un estribillo para mí maravilloso, fuerte, pegadizo y que gana en belleza cuando se repite en el parón que hay casi al final del tema. Muchos matices de nuevo, teclado y piano que al final de la canción están en perfecta conjunción.
La última pieza Rockera es un clasicazo algo más famoso que muchas de las comentadas, se trata de “Hearts On Fire” y en este caso estamos delante de otro trallazo que comienza con un riff de guitarra potente y efectivo y que siempre me recordó y me recuerda al de “House Arrest” del siguiente disco, el ”Waking Up The Neighbours”; es un temazo que define lo que es el rock melódico: muy clásico, directo, con mucho sentimiento y un estribillo pegadizo.
Llegamos al final para presentar otra de esas baladas maravillosas del canadiense e injustamente poco valorada; y es que “Home Again” es una de mis baladas favoritas, de esas baladas rockeras con sentimiento tipo “Heaven”, que me encanta, con cuidados teclados y sensible piano; precioso e intenso estribillo, que tras el solo de guitarra desemboca en un estribillo y guitarra final que pone definitivamente los pelos de punta, dejándote destrozado pero con ganas de volver a darle al “Play” para comenzar a escuchar el disco de nuevo.
Y sin mucho más que decir resumo diciendo que se trata de una obra perfecta, tal vez más madura y personal que sus discos más cotizados. Una auténtica joya.
Si por alguna casualidad alguien no lo ha escuchado, por supuesto recomiendo dicha escucha encarecidamente.
En “Into The Fire” vemos a un Bryan Adams mucho más maduro y personal y con aún más protagonismo en el disco (varios solos de guitarra suyos como por ejemplo en “Another Day” y en “Heat Of The Night”). También hay varias canciones donde coge el mando en el piano, teclados, percusión y demás como ya hizo en discos anteriores.
A la producción está el propio Bryan Adams como siempre y Bob Clearmountain (The Rolling Stones, Toto, Bon Jovi, Bruce Springsteen, y un largo etc…), última vez que trabajaría con él pues en el siguiente disco ya entraría en juego el señor “Mutt”.
Y ya metiéndonos de lleno en el álbum, éste comienza con “Heat Of The Night”, un medio tiempo rockero que va subiendo en intensidad conforme avanza la canción; gran base rítmica y posterior estribillo pegadizo que gana con las escuchas. Estructura muy clásica; después del solo de guitarra llegamos al clímax de intensidad y sentimiento con matices en la parte final muy conseguidos en el estribillo y en los punteos rítmicos.
Le sigue “Into The Fire”, otro medio tiempo que da título al disco, un tema mucho más melódico que el anterior, es una joya, muy elegante donde parece que el bajo toma las riendas rítmicas de la canción, gran protagonismo; hay buenas guitarras y muchos detalles en los teclados y piano puntuales que adornan excepcionalmente la pieza. Parón con riff de guitarra después del solo que hace ganar en sentimiento. Perfecta.
“Victim Of Love” es una balada impresionante a mi juicio, comienza muy tranquila, muy clásica pero va subiendo paulatinamente de intensidad, con una lead guitar siempre por debajo y una voz de Bryan muy rasgada; la canción en sí y sobre todo en su parte final es desgarradora y de muchísimo sentimiento. Ese final con voz, estribillo y solo de guitarra final es muy intensa (aunque me repita) y a mí particularmente me llega hasta lo más hondo y me pone los pelos de punta… me hace hasta sudar jeje.
Para volver al ritmo rockero tras ese pequeño inciso lento tenemos “Another Day”, realmente el primer tema rockero a la antigua usanza, de las directas, rápida y sencilla, pero con muchísimo trabajo detrás, un piano siempre por debajo y una lead guitar en este caso a cargo del propio Bryan como dije antes; después del solo otro parón tan típico en nuestro estilo pero no con estribillo sino parón que da pausa a la canción para terminar de una manera más vertiginosa a modo de solo de guitarra. Me encanta esta canción, insultantemente simple pero de las que levanta el ánimo.
La sensibilidad llega a lo más alto con “Native Son” y no me quiero extender demasiado que me enrollo como las persianas, pero es que este tema no se puede describir con palabras, sólo escuchándolo se dice todo; probablemente la más elegante del disco. Tema que va increscendo poco a poco, con una guitarra preciosa; el momento posterior al solo de guitarra, tras el estribillo donde hay un parón y un nuevo solo de guitarra mucho más personal y su posterior arranque hasta el final es sencillamente maravilloso. ¡Tremenda! Comentar que este tema en directo pone los pelos de punta.
Continuamos con “Only The Strong Survive”, tema de rock clásico americano en estado puro para animar al personal y a lo que no es el personal; un trallazo tremendo con un puente-estribillo pegadizo a más no poder. Directo para cargar las pilas pero con mucho sentimiento y matices de piano. iba a decir que es otra de mis favoritas pero es que el disco entero es favorito.
Otro de los momentos sensibles lo tenemos con “Rebel”, una preciosa balada muy fina y con mucho sentimiento; comienza con la voz y con el piano que va subiendo progresivamente en el puente para desembocar con un estribillo aún mejor y lleno de fuerza desgarradora. El parón que hay después del solo de guitarra y el grito de Bryan es precioso (otro momento de pelos de punta), con esa vuelta al piano y acompañándole únicamente la voz. Otro temazo de 10.
“Remembrance Day” es otro de esos medio tiempos que me encanta y que personalmente me parece perfecto, elegante, sencillo pero brillantísimo, dándole el protagonismo de nuevo al bajo en el inicio del tema para posteriormente ir subiendo hacia un puente que anticipa un estribillo para mí maravilloso, fuerte, pegadizo y que gana en belleza cuando se repite en el parón que hay casi al final del tema. Muchos matices de nuevo, teclado y piano que al final de la canción están en perfecta conjunción.
La última pieza Rockera es un clasicazo algo más famoso que muchas de las comentadas, se trata de “Hearts On Fire” y en este caso estamos delante de otro trallazo que comienza con un riff de guitarra potente y efectivo y que siempre me recordó y me recuerda al de “House Arrest” del siguiente disco, el ”Waking Up The Neighbours”; es un temazo que define lo que es el rock melódico: muy clásico, directo, con mucho sentimiento y un estribillo pegadizo.
Llegamos al final para presentar otra de esas baladas maravillosas del canadiense e injustamente poco valorada; y es que “Home Again” es una de mis baladas favoritas, de esas baladas rockeras con sentimiento tipo “Heaven”, que me encanta, con cuidados teclados y sensible piano; precioso e intenso estribillo, que tras el solo de guitarra desemboca en un estribillo y guitarra final que pone definitivamente los pelos de punta, dejándote destrozado pero con ganas de volver a darle al “Play” para comenzar a escuchar el disco de nuevo.
Y sin mucho más que decir resumo diciendo que se trata de una obra perfecta, tal vez más madura y personal que sus discos más cotizados. Una auténtica joya.
Si por alguna casualidad alguien no lo ha escuchado, por supuesto recomiendo dicha escucha encarecidamente.
AUTOR: Juanan (Lord Ford Sammet)
