LEATHER BOYS - BACK IN THE STREETS
60/100
DISCOGRÁFICA: AUTOEDITADO
ESTILO: SLEAZY ROCK
PRODUCTOR: MIGUEL HERRERO
MÚSICOS:
LEATHER ROSE: CANTANTE
LEATHER SEX: GUITARRA Y COROS
LEATHER DANGEROUS DICK: GUITARRA Y COROS
LEATHER BLUESMAN: BAJO Y COROS
LEATHER PREACHER: BATERÍA
TRACLIST
LEATHER GUNNER
THE BEST
SEXAGENARY SEX
CRIES IN THE NIGHT
HARD SEX GIRL
HEART OF STONE
SWEET REVELATION
RNR GETS ME HIGH
LORD OF THE WHORES
RIDING, FIGHTING AND DRINKING
BACKSTABBER
BUTTERFLY WINGS
Si el objetivo de estos chicos es fabricar un rock festivo, que recupere el sonido de las bandas sleazy que lo hicieron popular, y procurar un rato de diversión a sus fans, con su nuevo disco Back in the streets puede decirse que el objetivo está conseguido. Si algo se les puede otorgar a Leather boys es su capacidad de reproducir fielmente el sonido que puede identificarlos como pertenecientes a esa corriente. El inconveniente es que uno no puede conformarse con eso, o no debe. El disco cumple, como decía, su inmediata función de transmitir rock festivo, pero tras media docena de canciones parecidas, hasta el más fiestero termina por cansarse. Y si no lo es, peor. ¿La melodía de la guitarra acústica del comienzo de “Cries in the night” y la de la eléctrica de “Hard sex girls” no son casi iguales? ¿Y “Sexagenary sex” y “Rnr gets me high” no son muy parecidas, a pesar de la inclusión de vientos en la segunda?
Estructuras de similar construcción, riffs parecidos entre sí y sobre todo unas melodías vocales apenas existentes –a pesar del buen estilo de Leather Rose- que entran de la misma manera en todas las canciones, lastran un disco que se regocija en su propia y festiva existencia. Los solos de guitarra tampoco es que aporten demasiado a las canciones.
Al margen de todo eso no puede negárseles la virtud de hacer bien lo que hacen: las guitarras de Leather Sex y Leather Dangerous Dick, aunque sin mucha diversidad, suenan a ese rock sucio bien reforzado por la voz de Leather Rose, y los coros de los estribillos macarrizan el conjunto. Sin complicaciones. En algunos estribillos aciertan con los juegos de melodías como en “Cries in the night” y en la que abre el disco “Leather gunner”. En “Sweet revelation” se quedan cortos.
Sin embargo se muestran más ambiciosos en “Butterfly wings”, la canción que cierra el disco, con un comienzo lento en un registro de voz diferente y melodías más trabajadas. El álbum se beneficia de las colaboraciones de Ramón Lage en "Heart of stone", de la guitarra de Toni Bustamante B. en “Butterfly wings”, y de las voces de Law González, Riot Lau y Alba Sadeghi.
Así que si tomamos la primera canción y la última sin escuchar el resto, el aficionado podría esperar del disco algo que no creo que vaya a encontrar, pues en ellas se muestran las virtudes que la banda ha dejado sin explotar. Quizás no sean esas sus intenciones.
Estructuras de similar construcción, riffs parecidos entre sí y sobre todo unas melodías vocales apenas existentes –a pesar del buen estilo de Leather Rose- que entran de la misma manera en todas las canciones, lastran un disco que se regocija en su propia y festiva existencia. Los solos de guitarra tampoco es que aporten demasiado a las canciones.
Al margen de todo eso no puede negárseles la virtud de hacer bien lo que hacen: las guitarras de Leather Sex y Leather Dangerous Dick, aunque sin mucha diversidad, suenan a ese rock sucio bien reforzado por la voz de Leather Rose, y los coros de los estribillos macarrizan el conjunto. Sin complicaciones. En algunos estribillos aciertan con los juegos de melodías como en “Cries in the night” y en la que abre el disco “Leather gunner”. En “Sweet revelation” se quedan cortos.
Sin embargo se muestran más ambiciosos en “Butterfly wings”, la canción que cierra el disco, con un comienzo lento en un registro de voz diferente y melodías más trabajadas. El álbum se beneficia de las colaboraciones de Ramón Lage en "Heart of stone", de la guitarra de Toni Bustamante B. en “Butterfly wings”, y de las voces de Law González, Riot Lau y Alba Sadeghi.
Así que si tomamos la primera canción y la última sin escuchar el resto, el aficionado podría esperar del disco algo que no creo que vaya a encontrar, pues en ellas se muestran las virtudes que la banda ha dejado sin explotar. Quizás no sean esas sus intenciones.
AUTOR: Joserra
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